Os comparto mi reflexion en ese espacio generoso que Paco Martin nos abre en el periódico digital "Extremadura al dia". Adelantandome un poco a la llegada de la Navidad os ofrezco este menú de ilusiones y de deseos.
LA MEJOR CENA DE NAVIDAD
INGREDIENTES:
-La mayor cantidad de gente posible, a la que amamos profundamente con diferentes tipos de amores.
-La certeza interior de no tener odios, ni sentir rencores o envidias
-La serena tranquilidad de una familia sana y unida.
-La mirada alerta sobre el que sufre y carece
-El sano orgullo espiritual que genera disfrutar de nuestros hijos, en tanto son buenas personas.
-La esperanza de un mundo con menos diferencias y más solidaridad.
-El crecimiento paulatino pero sostenido de una conciencia cívica y un definido respeto por el planeta, evitando conductas depredadoras y egoístas.
- La tranquilidad que produce un buen trabajo, tarea, profesión, actividad, que garantice el sustento de nuestros seres queridos
-El logro de un espacio grato para cantar, para leer, para actuar, para esculpir. Es decir, para liberar nuestra creatividad y expandir el alma.
- La convicción definitiva que sostenga nuestra escala de valores esenciales, transmitida y recogida por generaciones de familias con idénticas convicciónes, independientemente del cambio de usos y costumbres. (hay otras cosas que nunca deben cambiar)
-El alivio que produce saber que nadie en nuestro país, en Navidad, deba pedir comida o quedarse con hambre, ya que el trabajo digno y el pago adecuado serían entonces moneda corriente, y porque vivimos y compartimos un país que puede hacer cumplir este anhelo.
- La creencia firme de que la religión que consiga hacer todo esto de cada uno de nosotros es la mejor religión. Todo esto es aquello que nos haga más compasivos, más sensibles, más desapegados, más amorosos, más humanitarios, más responsables, más éticos.
Pues amigos. Si alguna Navidad podemos decir que en cada plato había todas estas delicias, que las compartimos con los presentes y que fuimos parte en la confección de esta cena con el aporte de algunos de estos insustituibles bocados, no tengo dudas que esa Navidad será inolvidable. En tanto todo esto se concrete, tal vez podamos poner todas las fuerzas y las ganas en lograr aunque sea uno de estos manjares, y prometernos calladamente que el año próximo lo llevaremos a la mesa, que cada año elaboraremos uno nuevo y más gente será la cocinera
FELICES FIESTAS FAMILIARES, UNIVERSALES Y SOLIDARIAS y que mágicamente, al brindar, entonemos en silencio un villancico que forme una guirnalda con nuestras voces de este a oeste y de norte a sur, en un mundo que se sacude y gime pidiéndonos ayuda y compromiso. . .
LA MEJOR CENA DE NAVIDAD
INGREDIENTES:
-La mayor cantidad de gente posible, a la que amamos profundamente con diferentes tipos de amores.
-La certeza interior de no tener odios, ni sentir rencores o envidias
-La serena tranquilidad de una familia sana y unida.
-La mirada alerta sobre el que sufre y carece
-El sano orgullo espiritual que genera disfrutar de nuestros hijos, en tanto son buenas personas.
-La esperanza de un mundo con menos diferencias y más solidaridad.
-El crecimiento paulatino pero sostenido de una conciencia cívica y un definido respeto por el planeta, evitando conductas depredadoras y egoístas.
- La tranquilidad que produce un buen trabajo, tarea, profesión, actividad, que garantice el sustento de nuestros seres queridos
-El logro de un espacio grato para cantar, para leer, para actuar, para esculpir. Es decir, para liberar nuestra creatividad y expandir el alma.
- La convicción definitiva que sostenga nuestra escala de valores esenciales, transmitida y recogida por generaciones de familias con idénticas convicciónes, independientemente del cambio de usos y costumbres. (hay otras cosas que nunca deben cambiar)
-El alivio que produce saber que nadie en nuestro país, en Navidad, deba pedir comida o quedarse con hambre, ya que el trabajo digno y el pago adecuado serían entonces moneda corriente, y porque vivimos y compartimos un país que puede hacer cumplir este anhelo.
- La creencia firme de que la religión que consiga hacer todo esto de cada uno de nosotros es la mejor religión. Todo esto es aquello que nos haga más compasivos, más sensibles, más desapegados, más amorosos, más humanitarios, más responsables, más éticos.
Pues amigos. Si alguna Navidad podemos decir que en cada plato había todas estas delicias, que las compartimos con los presentes y que fuimos parte en la confección de esta cena con el aporte de algunos de estos insustituibles bocados, no tengo dudas que esa Navidad será inolvidable. En tanto todo esto se concrete, tal vez podamos poner todas las fuerzas y las ganas en lograr aunque sea uno de estos manjares, y prometernos calladamente que el año próximo lo llevaremos a la mesa, que cada año elaboraremos uno nuevo y más gente será la cocinera
FELICES FIESTAS FAMILIARES, UNIVERSALES Y SOLIDARIAS y que mágicamente, al brindar, entonemos en silencio un villancico que forme una guirnalda con nuestras voces de este a oeste y de norte a sur, en un mundo que se sacude y gime pidiéndonos ayuda y compromiso. . .
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